Fundación de Caá Catí
orría
el año 1764... y un 7 de abril aparecían los primeros antece- dente
sobre la Fundación de Caá Catí, nombre que en guaraní significa monte de
olor pesado, es el que designa a la población que es cabecera del
departamento de General Paz.
Por Resolución del Concejo Deliberante y el Poder Ejecutivo Municipal,
declararon finalmente que el 7 de abril, fecha en que se recuerda el
fallecimiento, en el año 1851, del Coronel, Bernabé Antonio Esquivel
(Chiquillo), sea tomada como fecha principal de recordación del pueblo.
A raíz un incendio que se produjo en el archivo de su iglesia se quedó
sin los documentos que remitían a los orígenes de su fundación, y por
este motivo el pueblo nunca tuvo una fecha de recordación histórica,
sino que la celebración máxima del calendario se realizó siempre el día
de su patrona, 7 de octubre, en advocación de Nuestra Señora del
Rosario, la que dispuso el 22 de agosto de 1764 el obispo de Buenos
Aires, monseñor de la Torre, en ocasión de la erección del curato.
Hoy la noticia es que a partir de una feliz iniciativa de la
Municipalidad y su Concejo Deliberante, que encomendó a la profesora de
Historia y actual directora de la Escuela Normal, Nilka Cáceres, la
tarea de investigar sobre el origen de Caá Catí, el 7 de abril de cada
año se recordará la fundación de este pueblo, cuya fecha determina la
iniciativa que sea en el día de la muerte de uno de sus más ilustres
hijos: el Coronel, Bernabé Antonio Esquivel (Chiquillo) en Caá Catí.
Un grande de nuestra historia
El 7 de abril de 1851 muere el coronel Bernabé Antonio Esquivel (a)
Chiquillo. Había nacido en Caá Catí, cuando este pueblo presentaba el
aspecto de una gran aldea, aunque según Valerio Bonastre, nació en la
ciudad de Corrientes hacia 1789 o 1790; eso sí, él siempre se consideró
un auténtico caacatieño. Pasó a la posteridad con el sobrenombre de
"Chiquillo", como lo llamaban sus amigos, sus comprovincianos y sus
camaradas de ejército.
Perteneció a una importante familia cuyos antepasados se remontaban a
los tiempos de la conquista y colonización hispánicas. Sus padres fueron
Nicolás Esquivel y Micaela Esquivel y fue el último de siete hermanos,
cinco varones y dos mujeres.
En 1813 “Chiquillo” ya figuraba como teniente de un Escuadrón de
Caballería que era comandado por su hermano Juan Mariano, con quien
acompañó a Belgrano en su incursión al Paraguay y más tarde hasta la
Banda Oriental.
Luego fue colaborador de su hermano León, designado comandante militar
del departamento de Caá Catí por Francisco "Pancho" Ramírez., cuando
éste instaló su República Entrerriana en nuestra provincia. León
Esquivel, siempre acompañado de “Chiquillo”, junto con Pedro Ferré, los
hermanos Fernández Blanco, los García de Cossio, Nicolás Atienza y
otros, habían sido los principales actores directos de la revolución del
12 de octubre de 1821, movimiento que convocó para el 17 de octubre a
una asamblea popular que resolviera sobre la proclamación de la libertad
provincial, y dentro de la independencia “La unión y fraternidad con las
demás provincias de Sudamérica”.
El Sargento Mayor Nicolás Ramón de Atienza fue confirmado como
gobernador provisorio y se levantó la Comandancia Militar en San Roque.
Los comandantes que suscribieron este acuerdo fueron León Esquivel,
Manuel Antonio Corrales, Manuel Antonio Aquino, Juan Manuel Sánchez,
Juan Antonio Guery y Francisco Antonio Gómez.
En septiembre de 1832 a raíz de la constante invasión de paraguayos
sobre el territorio misionero, cuya jurisdicción pertenecía a
Corrientes, el Congreso Provincial autorizó al gobierno a expulsar de él
a los invasores y el gobernador Pedro Ferré ordenó la organización de
unidades de veteranos e instruyó a que se disciplinen milicias populares
y se artilló la capital. Al frente de uno de esos cuerpos estuvo el
coronel “Chiquillo” Esquivel, y lucho denodadamente en la frontera
contra los emisarios del dictador Rodríguez de Francia, quien sostenía
la soberanía paraguaya sobre los territorios misioneros.
Luego, en 1834, el coronel Bernabé Antonio Esquivel (a) Chiquillo es
destinado nuevamente a la Frontera, en el límite con Paraguay, para
incorporarse al Regimiento que comandaba Genaro Berón de Astrada, cuya
misión era impedir que los soldados paraguayos crucen a territorio
correntino. Con este mismo jefe, quien se constituirá en el “Mártir de
Pago Largo”, Esquivel pelea denodadamente en la trágica batalla en la
que pierden la vida cerca de 2.000 correntinos.
En octubre de 1839 cuando el general Juan Lavalle llega a Curuzú Cuatiá,
el coronel Esquivel se pone a su lado en la organización del Ejército
Libertador que comandará el porteño para iniciar la lucha contra Juan
Manuel de Rosas, aunque no lo acompañó en sus luchas, pues debió
permanecer en Caá Catí al frente de la Comandancia.
Se alistó más tarde en el Ejército de Reserva que preparó el general Paz
en el campamento de Villanueva y participó en la batalla de Caá Guazú el
28 de noviembre de 1841, donde derrotaron a las tropas del rosistas del
gobernador entrerriano Pascual Echaüe.
Después de la enorme derrota sufrida por nuestro Ejército Libertador el
6 de diciembre de 1842 en Arroyo Grande frente a las tropas rosistas
comandadas por el oriental Manuel Oribe, al asumir el gobierno de
Corrientes Pedro Dionisio Cabral, "Chiquillo" Esquivel fue reemplazado.
Cuando el 31 de marzo de 1843 los hermanos Joaquín y Juan Madariaga
inician desde su exilio en el Brasil su invasión libertaria a
Corrientes, “Chiquillo” se suma a sus huestes y ayuda a recuperar la
provincia que estaba en manos de los rosistas. En la batalla de Laguna
Brava, el 6 de mayo de 1843, librada precisamente a orillas de la laguna
de este nombre, situada muy cerca de la ciudad de Corrientes, camino a
San Luis del Palmar caen derrotados los hombres de Rosas en Corrientes
Con su grado de coronel y al frente de sus caacatieños estuvo nuevamente
en 1845 a las órdenes del general Paz cuando invade Entre Ríos.
Durante el gobierno de Benjamín Virasoso después de la trágica batalla
de Vences, en la que peleó al lado del gobernador Madariaga, el 27 de
noviembre de 1847, adhirió a la Federación y fue respetado en sus
funciones de la Comandancia.
Finalmente participó en la expedición contra invasores paraguayos
llevada a cabo en 1849 por el coronel Miguel Virasoro.
Llevó a cabo una obra progresista en su pueblo de Caá Catí en todos los
ramos de la administración y fue por eso que quedó su recuerdo en la
historia. Falleció en Caá Catí el 7 de abril de 1851.
Caá Catí
A principios del siglo XVIII el Cabildo correntino estableció un
presidio que tenía por misión contener los avances y desmanes que solían
cometer los aborígenes de las misiones jesuíticas de la zona del río
Uruguay.
En 1743 llegó a la zona de Caá Catí fray Ignacio Lezcano, mercedario,
que pidió limosna para levantar allí una capilla y al que luego el
doctor Casajús, párroco de Saladas, lo nombró encargado de una ayudantía
de parroquia. La capilla fue levantada en tierras que fueron del capitán
Simón Hernández y, a su vez, los mercedarios, compraron una estancia en
la zona en 1751.
En 1818 las tropas de Andresito, lugarteniente de Artigas, asaltaron el
pueblo y se llevaron sus archivos parroquiales.
En 1823, durante el gobierno de Juan José Fernández Blanco, primer
gobernador constitucional de Corrientes, fue replanteado y mensurado el
pueblo y el 23 de noviembre se aprobó el deslinde de los terrenos
destinados al pueblo, dividido en 25 manzanas, incluida la plaza
principal.
En 1831 fue designado Comandante Militar Juan Alberto Albarenga, a quien
lo sucedió en el cargo el 31 de diciembre de 1849, Bernabé Antonio
Esquivel (a) Chiquillo. Era directora de la Escuela de Niñas la señora
Petrona Reyna y preceptora Juana Cabral.
Por decreto del 13 de octubre de 1852 se elevó al rango de villa y el 5
de diciembre de 1856 a la categoría de ciudad.
Un servicio de mensajerías lo mantenían vinculado al resto de la
provincia, siendo su puerto natural el de Itá Ibaté.
Por ley del 18 de mayo de 1910 le fue cambiado su nombre guaraní por el
de General Paz, pero desde 1970, por decisión del entonces gobernador
Adolfo Navajas Artaza, se llama nuevamente Caá Catí, preservando el
departamento el nombre del ilustre cordobés.
Lomas de Caá Catí
El 24 de Mayo de 1818, un pronunciamiento militar en la Capital, derroca
al Gobernador Juan Bautista Méndez, poniendo el mando político en el
Cabildo y el de las fuerzas militares en el Coronel José Francisco
Vedoya. El General Artigas dispuso dominar esta revolución que buscaban
separarse de su alianza, encomendando la represión al Comandante Militar
de Misiones Andresito Artigas. Desde Santo Tomé éste se corrió por San
Carlos por la costa del Paraná, acantonándose en las Lomas de Caá Catí.
El Cabildo Gobernador estableció en Saladas una división a las órdenes
del Coronel Vedoya, e hizo avanzar otra por el centro de Caá Catí,
comandado por el Sargento Mayor Francisco Casado.
Esta última atacó al ejercito de Andresito Artigas, en las lomas de Caá
Catí, el 14 de Julio de 1818, venciéndolo. Andrés Artigas reorganizó sus
montoneras, y corriéndose por Mburucuyá atacó y derrotó al Coronel
Vedoya en Saladas, marchando sobre la Capital que debió someterse. La
fuerza de Casado, en buena parte fue milicia de Caá Catí, se dispersaron
refugiándose en los montes de la zona.
Campamento del General Paz
Fue el campamento provisional, organizado en la costa del río Santa
lucía, mientras el General Paz elegía el lugar conveniente para aceptar
batalla del ejército comandado por el General Ur-quiza, año 1846.
Durante este acantonamiento, Caá Catí contribuyó con nuevo contingente
de hombres y con todos los elementos de que disponía.
La presencia del ejército en este lugar, ante la inminencia de una gran
Invasión de la fuerza de Urquiza y con la imposibilidad de que el
Ejército de Corrientes pudiera resistir victoriosamente en la frontera
sur o en el centro de la Provincia, el General Paz inició su retirada
hacia el norte, en busca de un punto estratégico. Con tal propósito, fue
retirado a su paso todos los recursos que pudiera utilizar Urquiza,
llegando así hasta Caá Catí . En este acantonamiento, el ejército
permaneció quince días.

Agricultores de Colonia Carolina

Parroquia de Caá Catí

Plaza de General Paz
